Mostrando entradas con la etiqueta Consejo Mundial de Iglesias. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Consejo Mundial de Iglesias. Mostrar todas las entradas

viernes, 5 de febrero de 2010

Secretario general del Consejo Mundial de Iglesias confía en progresos hacia unidad cristiana

En el servicio ecuménico de Vísperas presidido hoy por el Papa Benedicto XVI, el secretario general del Consejo Mundial de Iglesias (CMI), Rev. Dr. Samuel Kobia, destacó la importancia de "una iglesia única y unida en su testimonio" ante un mundo caracterizado por la violencia y la desunión. El servicio celebrado en Roma concluyó la centésima edición de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos.

Por la mañana, Kobia y los miembros del Grupo Mixto de Trabajo entre la Iglesia Católica Romana y el CMI fueron recibidos en audiencia privada por el Papa.

En la oportunidad, Benedicto dio gracias a Dios "por los frutos del movimiento ecuménico, en el que se puede discernir la presencia del Espíritu Santo que impulsa el crecimiento de todos los seguidores de Cristo en la fe, la esperanza y el amor". El Papa elogió también "la fructuosa relación ecuménica" entre la Iglesia Católica Romana y el CMI. Por su parte, Kobia reafirmó la importancia de la oración como "fundamento espiritual de todos los esfuerzos que dieron lugar al movimiento ecuménico y a los logros del pasado", así como la necesidad de proseguir en el empeño ecuménico "con un espíritu de oración".

Kobia se reunió también con representantes de las iglesias miembros del CMI y de la Federación de Iglesias Protestantes de Italia. La conversación se centró en el tema de la espiritualidad en una era de secularización, así como en la actual situación ecuménica en Italia, donde las iglesias protestantes están decididas a mantener un diálogo abierto y sincero. "Estoy muy interesado en sus opiniones, ya que sus iglesias son los ojos y oídos del CMI en Italia", dijo Kobia a sus anfitriones.

En una entrevista publicada hoy en el diario vaticano L'Osservatore Romano, Kobia expresó su visión de que el movimiento ecuménico alcanzará, para mediados del siglo XXI, "un nivel de unidad tal que los cristianos de todo el mundo, independientemente de sus afiliaciones confesionales, puedan orar y celebrar el culto juntos y sentirse bienvenidos a compartir la Mesa del Señor en cualquier iglesia". Este ejemplo de unidad, continuó, podrá "ayudar a la humanidad a superar todas las divisiones", de forma que todos los pueblos del mundo "puedan vivir juntos en paz y armonía, independientemente de sus antecedentes culturales y sus identidades".


- Más información sobre la Semana de oración por la unidad de los cristianos
- Crónica: Orar juntos por la unidad de los cristianos durante un siglo de cambios
- Comunicado (en inglés) del Grupo Mixto de Trabajo entre la Iglesia Católica Romana y el CMI, Roma, 20-27 de enero de 2008
- Grupo Mixto de Trabajo


Fuente: Consejo Mundial de Iglesias (CMI) / oikoumene.org

+ Leer más...

jueves, 28 de enero de 2010

Benedicto XVI insistió con la unidad de las iglesias cristianas

En una ceremonia celebrada esta tarde en la basílica de San Pablo Extramuros, con la que se concluyó la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, el Pontífice pidió a todas las iglesias cristianas (católica, protestante y ortodoxas) a unir fuerzas para una nueva evangelización.
Ciudad del Vaticano.- En un mundo "indiferente" y hasta "hostil" a la fe se necesita de la unidad de los cristianos para hacer creíble el mensaje del Evangelio, exhortó hoy el Papa Benedicto XVI.

En una ceremonia celebrada esta tarde en la basílica de San Pablo Extramuros, con la que se concluyó la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, el Pontífice pidió a todas las iglesias cristianas (católica, protestante y ortodoxas) a unir fuerzas para una nueva evangelización.

Urgió dar "un testimonio común" ante "los retos cada vez más complejos de nuestro tiempo, como la secularización y la indiferencia, el relativismo y el hedonismo, los delicados temas éticos sobre el principio y fin de la vida, los limites de la ciencia y la tecnología, el diálogo interreligioso".

"No faltan cuestiones que nos separan a los unos de los otros y que esperamos puedan ser superadas a través de la oración y el diálogo", dijo.

"Pero hay un contenido central del mensaje de Cristo que podemos anunciar juntos: la paternidad de Dios, la victoria de Cristo sobre el pecado y sobre la muerte con su Cruz y la resurrección, la confianza en la acción transformadora del Espíritu", añadió.

Según Benedicto XVI, el compromiso por la unidad de los cristianos "no es sólo tarea de algunos, ni una actividad accesoria de la vida de la Iglesia".

"Cada uno está llamado a dar su aportación para cumplir con aquellos pasos que lleven a la plena comunión entre todos los discípulos de Cristo", insistió.

Señaló que otros campos en los que los cristianos deben comprometerse es en la salvaguarda de lo creado y la promoción del bien común y de la paz.

También en la defensa de la centralidad de la persona humana, el compromiso para derrotar "las miserias de nuestro tiempo", como el hambre, la indigencia, el analfabetismo o la creciente diferencia entre ricos y pobres.

El Papa arribó a la basílica de San Pablo Extramuros en torno a las 17:30 horas locales (16:30 GMT), donde fue recibido por los cardenales Agostino Villani, vicario de Roma y Walter Kasper, presidente del Pontificio Consejo para el Ecumenismo.

Entre los presentes estaban representantes de otras iglesias y comunidades eclesiásticas, como pastores protestantes, el obispo metropolitano Veneziz (que representa en Italia al patriarca ecuménico Bartolomeo) y los representantes de los patriarcas ruso y rumano.


Fuente: Milenio.com / "Exhorta el Papa a las confesiones cristianas a la unidad"
Fotografía: El Rev. Dr. Samuel Kobia, el Cardenal Walter Kasper y el Papa Benedicto XVI (de izquierda a derecha) (creditos: L'Osservatore Romano / Consejo Mundial de Iglesias)

+ Leer más...

miércoles, 5 de septiembre de 2007

CÓDIGO DE CONDUCTA CRISTIANO SOBRE CONVERSIÓN RELIGIOSA OBTIENE APOYO CADA VEZ MAYOR.

La Alianza Evangélica Mundial (WEA por su sigla en inglés) está dispuesta a unirse al Consejo Mundial de Iglesias (CMI) y al Vaticano para apoyar un código de conducta común que rija las actividades de búsqueda de conversos al cristianismo.

Algunos de los participantes en la consulta de Toulouse (de izq. a der.): obispo Geevarghese Mor Coorilos (ortodoxo, India), pastor Dr. Thomas Schirrmacher (evangelical, Alemania), pastor Dr. Hermen Shastri (protestante, Malasia), pastor Dr. Tony Richie (pentecostal, EUA), Mons. Augustine Shao (católico romano, Zanzíbar), Mons. Robert Le Gall (católico romano, Francia).

El secretario general de la WEA, pastor Dr. Geoff Tunnicliffe, "otorgó su plena aprobación" a la participación de su organización en el proceso patrocinado hasta ahora por el CMI y el Vaticano, dijo el pastor Dr. Thomas Schirrmacher, director del Instituto Internacional para la Libertad Religiosa de dicha organización. La WEA es una asociación de organizaciones e iglesias evangelicales con unos 420 millones de miembros en todo el mundo.

Schirrmacher fue uno de los oradores en la consulta celebrada del 8 al 12 de agosto en Toulouse, Francia, en la que unos 30 teólogos y líderes de iglesias católicos, ortodoxos, protestantes, pentecostales y evangélicos de Europa, Asia, África y los Estados Unidos esbozaron el contenido del código de conducta que se espera finalizar para 2010.

Al inaugurar la consulta, el arzobispo de Toulouse, Mons. Robert Le Gall, monje benedictino experimentado en el diálogo interreligioso, dijo que veía el código de conducta como un instrumento para garantizar el "respeto mutuo entre quienes están comprometidos con una religión" y, al mismo tiempo, preservar el "derecho a propagar y explicar la propia fe".

Para el pastor Dr. Tony Richie de la Iglesia de Dios, denominación pentecostal con sede en los Estados Unidos, el código de conducta no es sobre "si" los cristianos evangelizan, sino sobre "cómo" lo hacen. Richie abogó por una "evangelización dialógica", orientada ecuménicamente y caracterizada por un enfoque ético.

El secretario general del Consejo de Iglesias de Malasia y comoderador de la comisión Fe y Constitución del CMI, pastor Dr Hermen Shastri, propuso que el ethos fundamental del código de conducta sea una actitud respetuosa del derecho a sus creencias que tienen los creyentes de toda religión. "Hay que decir a los predicadores religiosos que ninguna religión tiene el monopolio de la verdad, que hay muchos medios para encontrar la salvación."

Según el miembro del consejo ejecutivo de la WEA, John Langlois, el código de conducta debería expresar "arrepentimiento por las malas acciones del pasado, a fin de mostrar con claridad que se ha superado la mentalidad de superioridad con respecto a otras religiones".

El código va tomando forma.

Entre las cuestiones señaladas por los participantes como elementos en los que debería basarse el código de conducta, cabe citar: formas comunes de entender la conversión, el testimonio, la misión y la evangelización así como la preocupación por la dignidad humana; una distinción entre proselitismo agresivo y evangelización; y el equilibrio entre el mandato de evangelizar y el derecho a elegir la propia religión.

"Aunque se trata todavía de resultados muy preliminares, el hecho de que representantes de todas estas diferentes vertientes de la vida cristiana hayan sido capaces de reunirse y debatir una cuestión tan compleja, empezando por construir un consenso, es ya de por sí todo un éxito", afirmó el pastor Dr Hans Ucko, encargado del programa del CMI para el diálogo y la cooperación interreligiosos.

La complejidad de la cuestión se puso de manifiesto en la consulta a través de las contribuciones que reflejaron muy diversas experiencias en contextos diferentes: desde el vivir como minoría cristiana en la India hasta anunciar el evangelio a inmigrantes turcos en Austria o tener que rechazar a personas que piden el bautismo en Zanzíbar; desde ser misionero luterano en la Nigeria musulmana hasta ser sacerdote anglicano en una ciudad británica donde hindúes han comprado una antigua iglesia cristiana y celebran su culto en ella o ser un pentecostal estadounidense que lidia con el hecho de que los pentecostales "son ciertamente ecuménicos, pero no lo saben".

El código de conducta debería, por una parte, establecer aquello que todas las partes están de acuerdo en que se ha de evitar cuando se trata de la misión cristiana, tarea que resulta enorme teniendo en cuenta los muchos contextos existentes. Por otra parte, se espera que ofrezca orientaciones sobre el modo de afrontar cuestiones complicadas como los matrimonios interreligiosos.

Sus promotores esperan que el código de conducta cumpla varias finalidades: ser un instrumento de instrumento de incidencia pública en los debates con gobiernos que estudian leyes contra la conversión; contribuir a promocionar la causa de la libertad religiosa; atender las preocupaciones de otras religiones por el proselitismo cristiano e inspirarlas a considerar sus propios códigos de conducta; y ayudar a aliviar tensiones entre los propios cristianos.

Ninguno de los participantes intenciones propone -ni tiene los medios para- imponer el código de conducta entre sus miembros, pero todos confían en que éste podrá "impactar en sus corazones y sus mentes" y ejercerá una presión "moral" y "social" entre pares.

El paso siguiente en este proyecto de estudio, emprendido conjuntamente por el Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso y el programa del CMI sobre diálogo interreligioso, será la celebración en 2008 de una reunión en la que se redactará el código de conducta basándose en los resultados de la consulta de Toulouse. Iniciado en mayo de 2006 en Lariano/Velletri, cerca de Roma, el proyecto se denomina "Una reflexión sobre la conversión: de la controversia a un código de conducta compartido".

Fuente: Consejo Mundial de Iglesias
Data: 15 de agosto

+ Leer más...